En el siglo XIX sucedió un hecho bien lastimoso:
El emperador Napoleón, llevado por la ambición y el orgullo, se atrevió a
encarcelar al Sumo Pontífice, el Papa Pío VII. Varios años llevaba en prisión
el Vicario de Cristo y no se veían esperanzas de obtener la libertad, pues el
emperador era el más poderoso gobernante de ese entonces. Hasta los reyes
temblaban en su presencia, y su ejército era siempre el vencedor en las
batallas. El Sumo Pontífice hizo entonces una promesa: "Oh Madre de Dios,
si me libras de esta indigna prisión, te honraré decretándote una nueva fiesta
en la Iglesia Católica".
Y muy pronto vino lo inesperado. Napoleón que había dicho:
"Las excomuniones del Papa no son capaces de quitar el fusil de la mano de
mis soldados", vio con desilusión que, en los friísimos campos de Rusia, a
donde había ido a batallar, el frío helaba las manos de sus soldados, y el
fusil se les iba cayendo, y él que había ido deslumbrante, con su famoso ejército,
volvió humillado con unos pocos y maltrechos hombres. Y al volver se encontró
con que sus adversarios le habían preparado un fuerte ejército, el cual lo
atacó y le proporcionó total derrota. Fue luego expulsado de su país y el que
antes se atrevió a aprisionar al Papa, se vio obligado a acabar en triste
prisión el resto de su vida. El Papa pudo entonces volver a su sede pontificia
y el 24 de mayo de 1814 regresó triunfante a la ciudad de Roma. En memoria de
este noble favor de la Virgen María, Pío VII decretó que en adelante cada 24 de
mayo se celebrara en Roma la fiesta de María Auxiliadora en acción de gracias a
la madre de Dios (tomado de http://webcatolicodejavier.org/mariaauxi.html)
San Juan Bosco y la Auxiliadora
En 1860 la Santísima Virgen se aparece
a San Juan Bosco y le dice que quiere ser honrada con el título
de "Auxiliadora", y le señala el sitio para que le construya
en Turín, Italia, un templo.
Empezó la obra del templo con sus tres monedas
de veinte centavos cada una, pero fueron tantos y tan grande los
milagros que María Auxiliadora empezó a obtener a favor de sus devotos,
que en sólo cuatro años estuvo terminada la Gran Basílica. El Santo
solía decir: " Cada ladrillo de este templo corresponde a un milagro
de la Santísima Virgen", desde aquel Santuario comienza a extenderse
por el mundo la devoción a María bajo el título de Auxiliadora de
los Cristianos.
Oración Auxilio de los Cristianos
Santísima Virgen
María, Auxilio de los Cristianos, que dulce es para nosotros acudir a Tus Pies para implorar Tu Auxilio perpetuo.
Si las madres de la tierra nunca se olvidan de sus hijos, ¿cómo vas Tú, las más perfecta de las madres, olvidarte de mí?.
Concédeme pues, ¡te lo imploro!, Tu Auxilio perpetuo en todas mis necesidades, en todas mis penas, y especialmente en todas mis tentaciones.
Yo solicito Tu Auxilio perpetuo para todos los que sufren en estos momentos.
Ayuda al débil, cura al enfermo, convierte a los pecadores.
Concéde por Tu intercesión muchas vocaciones para la vida religiosa.
Obténnos, Oh María Auxilio de los Cristianos, que después de invocarte desde la tierra podamos amarte y darte las gracias eternamente en el Cielo.
Amen
Si las madres de la tierra nunca se olvidan de sus hijos, ¿cómo vas Tú, las más perfecta de las madres, olvidarte de mí?.
Concédeme pues, ¡te lo imploro!, Tu Auxilio perpetuo en todas mis necesidades, en todas mis penas, y especialmente en todas mis tentaciones.
Yo solicito Tu Auxilio perpetuo para todos los que sufren en estos momentos.
Ayuda al débil, cura al enfermo, convierte a los pecadores.
Concéde por Tu intercesión muchas vocaciones para la vida religiosa.
Obténnos, Oh María Auxilio de los Cristianos, que después de invocarte desde la tierra podamos amarte y darte las gracias eternamente en el Cielo.
Amen
San Juan Bosco
Reflexión: Madre Santa, enséñanos a valorar lo que por siglos has sido para la humanidad, modelo de auxilio, justicia y amor. Que Tu mano siempre sea puesta antes que la nuestra, para que nuestras acciones sean obras de misericordia. Que tus pies sean nuestro soporte para que donde estemos seamos instrumentos de nuestro Señor. Pon tus palabras en nuestra boca, para que de ella se emitan palabras de justicia, perdón y caridad, pero sobre todo pon tu amor en nuestras vidas para que podamos amarte y bendecirte en el nombrev de tu amadísimo hijo nuestro Señor Jesucristo.
MADRE AMADA, SE SIEMPRE NUESTRO AUXILIO!!!
HOLA QUERIDA PIEDAD,QUE ESTA MADRE QUE ES NUESTRO AUXILIO TE BENDIGA Y A TUS SERES AMADOS!
ResponderEliminarY ESPECIALMENTE A XIMENA,LA PONEMOS BAJO ELAMPARO DE NUESTRA MADRE Y NOS UNIMOS EN LA ORACIÓN POR SU SALUD,UN BESO,HASTA PRONTO.
jesusymariaenmivida@hotmail.com